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comandante vengo a ponerme a sus órdenes. Este borrachito fue mí mas estrecho colaborador. Con su astucia y atrevimiento logre resolver muchos problemas en momentos difíciles; además era mi confidente en lo personal y en quien confiaba mis asuntos privados.
En el sector Río Aurare el zamuro, se creo un autentico movimiento de lucha por la tierra, tipo los sin tierras del Brasil. En la enramada que construimos fueron colocadas pancartas con la imagen de Ezequiel Zamora y el lema: Oligarcas Temblad. El himno Zamorista sonaba en el campamento, también llevamos escritorios, computadoras, tomamos energía eléctrica de una de las viviendas cercanas y alumbramos el lugar. Un grupo wayuu se quedo a dormir para vigilar la erramada y los bienes muebles del movimiento. Un kiosco coca cola fue instalado en el campamento, en este se vendían comidas y refrescos. Esta enramada era la base central desde donde se desarrollaba una segunda face en la evolución del proyecto M.G.L.N. teníamos ya unos combatientes, nuevas armas, mejoramos equipos de comunicación y unos recursos mínimos, pero no era el momento de retirar la fachada “Mi pequeño país”. Teníamos que lograr el objetivo de generar la economía y de, formar militar, política e ideológicamente a nuestra gente. Teníamos que lograr armas modernas y con mucha capacidad de fuego.
Si pensábamos en una victoria militar, teníamos que contar con un ejército bien entrenado y bien armado. Esto teníamos que lograrlo clandestinamente, por lo que en todos nuestros trabajos no tenían que aparecer, ni nuestras siglas, ni nuestros colores. Todo esto formaba parte de un plan secreto de insurrección indígena. Las personas que participaban en el, proyecto, colaboraban con el plan, trabajaban y luchaban por el, pero siendo utilizados, pues ignoraban que las ocupaciones ilegales de tierra, obedecían al plan de insurgencia. Por causa de la seguridad no les era revelado.
Definitivamente me mude a Río Aurare el zamuro. Nunca dormía en un sitio fijo. Para la alimentación contrate un restaurante que nos suministraba la comida de todo el personal. Para celebrar nos fuimos a cenar a un restaurante al sur de Maracaibo. Fue allí donde comencé mi primer romance en “Mi pequeño país”. Esto ocurrió con una de mis secretarias, Karina Ramos, una mujer casada con un taxista. De allí, en la madrugada se fueron todos a beber